Calaveritas dedicadas a personal de Valle del Norte
Por René Gutiérrez G.
Estaba la muerte sentada
esperando un turno especial
pues
ya tenía planeado llevarse a su lado un mortal
mucho tiempo lo buscó pues
quería tenerlo a su lado
y a Martín se lo encontró
cuando festejaba su año
Vente Martín no te opongas
pues cadáver tú ya eres
y aunque pienses que razonas ya
vas sentado conmigo
pues muy pronto tú verás que
estás en estos parajes
donde inmortalmente durarás
pero debes de saber que ni
con Modesto, ni con Gil, ni con Gaby estarás.
Para Carolina García
Andaba la muerte en tacones tropezando en la corredera buscaba un cristiano o cristiana para llevarla al
panteón no se encontró con ninguno y ya muy triste regresaba cuando al doblar en la esquina a Carolina encontró la muerte que estaba caída a Caro le sugirió si puedes con estos tacones y no sufres ningún
tropezón te dejo otro rato en la tierra viviendo con emoción pero Caro muy asustada al avanzar se arrasó entonces la parca pensó sola yo no me voy.
El turno para Modesto Martínez
Estaba Modesto encerrado en su bunker o privado
nunca jamás supo como ella entró a su lado
Modesto se derrumbó al ver a la parca sentada
pues el jamás se esperaba
que la muerte de la mano lo llevara
vente conmigo, le dijo, te voy a necesitar
y aunque el lugar no conoces muy pronto advertirás
es un paraje bonito donde muchas nóminas harás
ya olvídate de este mundo pues al que conmigo vas nada
te faltará
ya no me mires así, y no tienes porque asustarte
porque te voy a llevar a donde honores te hacen
y muy pronto tu lo sabrás
que al camposanto te llevarán.
Para Vianey
Vianey creía estar a salvo
De la friolenta huesuda
Pero nunca se dio cuenta
Que ya la esperaba en la
puerta
¿Qué dices Vianey, me sigues
O sola puedes llegar?
Ni sola ni contigo yo quiero
seguir viviendo
Así es que no te me acerques
Porque de ti ni me acuerdo.
Lo que tú no sabes Vianey es
que conmigo ya estás
Sino lee tu epitafio que
sobre tu tumba ya está
Y así cuenta te darás que en
el paraíso reinarás.
Para José Mario Aguillón G.
El Valle del Norte recuerda
A un grande compañero
Pues sus gráficas se extrañan
En todito el mundo entero
Tus nietos e hijas suspiran
Al ver tus fotografías
Pues siete meses pasaron ya
De que de este mundo partieras
Y ahora con la huesuda en el
paraíso eterno estás.
Como retumba el destello
Cuando tu cámara desde allá arriba a la tierra voltea
A una gráfica tomar
Y en el Valle, Carolina lista
a publicarla está
José Mario Aguillón fue tu
nombre
Y los que te conocimos
Contigo siempre estaremos
Y ten la seguridad, de que
nunca te olvidamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario